Cierto científico estaba realizando un minucioso experimento, cuando su pequeño hijo lo interrumpió para que jugara con él. Queriendo salir del paso, el padre buscó una revista, la hojeó y encontró la imagen del mapamundi, lo recortó en forma de rompecabezas y se lo dio al niño, a fin de darle bastante trabajo, y que no le molestara más. El niño confundido trataba de armarlo, pero no podía; vez tras vez lo intentaba, hasta que desistió. Andando las horas, el científico pensó que había logrado su cometido, cuando entonces llegó el niño con el vidrio de la mesa; sorprendido, el científico le preguntó lo que había hecho, y el niño le explicó que, como no pude armar la tierra, volteó las figuras de la hoja y notó la imagen de unas personas, Pegó los recortes en el vidrio, y le dio forma con pegamento y cinta adhesiva –“solo así puede lograrlo”- detalló. El científico lo abrazó y se fue a jugar con él.
Este relato nos enseña una importantísima lección: para poder cambiar el mundo, a esta sociedad carente de valores éticos y morales, es necesario cambiar primero cada uno de nosotros. Y hoy es un día solemne y de vital importancia, ya que cerramos un ciclo en nuestras vidas, uno que no olvidaremos jamás, que nos enseñará a ser mejores personas, hombres y mujeres de provecho que nos enfrentaremos a este mundo en constante cambio, que exige lo mejor de cada individuo. ¡Muchachos! Esforcémonos por moldear nuestra personalidad cada día, esto nos permitirá tratar con todo tipo de personas y será una buena cualidad para la vida futura; esto exige esfuerzo de nuestros padres, que son indispensables en esta etapa, sean cuales sean nuestras circunstancias.
No puedo pasar por alto a los que hicieron posible que estuviéramos hoy aquí: nuestros profesores, que dieron todo de ellos, nos brindaron sus conocimientos, habilidades, y lo más importante: su amistad, la cual será indeleble al paso del tiempo. También al personal administrativo que ha luchado hombro a hombro a hombro con nosotros (aplausos).
Para concluir, quiero mencionarles esta última cosa: “Este no es el final, sino más bien el comienzo de una larga carrera, que espero que sea así, estará llena de logros y éxitos.
Gracias.
Valencia, 02 de agosto de 2009